Impacto en la Sociedad y Seguridad

En Argentina, miles de personas son detenidas por la tenencia de cannabis. Por ejemplo, en la Fiscalía Federal de Federico Delgado, se de detecto que todas aquellas personas detenidas eran jóvenes con pocas cantidades de marihuana en su poder, en promedio unos 10 gr por persona, Eso es evidente que es para consumo personal, (Aproximadamente un cigarrillo de marihuana contiene 1 gr de la misma). Aun así, a los detenidos se le forma una causa judicial, por ejemplo, en 15 días de agosto de 2018 se iniciaron 503 causas, 341 fueron por tenencia para consumo personal, para todo esto se estima que se necesitaron más de 14.000 hojas y aproximadamente casi 1.000.000 de pesos en peritajes realizados por departamentos científicos. Es decir, El Estado gasta mucho para perseguir a jóvenes que consumen Marihuana y dicha cantidad de dinero gastado podría ser destinada para otra cosa. (Fuente)

Aunque parezca loco, el Alcohol alguna vez en E.E.U.U estuvo prohibido, la famosa Ley Seca (1920-1933). Dicha prohibición dio origen al mercado negro del alcohol, controlado por mafias como la de Al Capone y generando muchísimas muertes durante el periodo de dicha ley, la prohibición no tuvo ninguna ventaja. Algo muy semejante a lo que paso hoy en día en Argentina en relación al consumo de Cannabis.

Alcohol siendo desechado tras su prohibición

¿Por qué hoy en día está Prohibida la Marihuana? El principal ideólogo fue Harry Anslinger, (Director de la Oficina Federal de Estupefaciente de E.E.U.U en la década de los años 30’y 40’) que, tras la caída de la Ley Seca, y al no saber que droga perseguir, se enfocó en el cannabis, que en aquella época era una droga popular entre los mexicanos inmigrantes y los afrodescendientes. Anslinger supo aprovecharse de la xenofobia y racismo de los americanos, difundiendo informes falsos sobre el consumo de esta droga. Finalmente, el cannabis fue prohibido en 1937.

Irónicamente en 1948 el “Zar Antidrogas” como se lo apodo, ocupo el cargo de Representante de los Estados Unidos ante la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas, y promovió un sistema de control del tráfico de algunas drogas a escala mundial. Y así es como en 1961 la ONU, firmaría La Convención única sobre estupefacientes, un tratado internacional contra la manufactura y el tráfico ilícito de drogas estupefacientes que conforma el fundamento del régimen global de control de drogas. Entre las grandes falacias de este tratado se encontraba la comparación de que mascar hojas de coca era un acto tan dañino como inyectarse heroína. (Fuente)

Harry J. Anslinger

Cuando hablamos de Despenalización, nos referimos a que por la tenencia del Cannabis no se reciba una pena, en otras palabras, que no se lo persiga al consumidor, como se lo hace en la Argentina. El Estado al perseguir al consumidor está violando derechos básicos, como, por ejemplo, el de Autonomía Personal y el de la Privacidad.

Si bien en muchos países se marcha por la legalización de esta droga, no hay muchos casos de legalización total de sustancias psicoactivas, el caso más conocido es el del tabaco, y los resultados están a la vista, estas empresas gozan de total libertad para hacer publicidad del tabaco siempre y cuando en los paquetes de sus productos diga “Fumar, es perjudicial para la salud”. La Legalización puede causar tanto daño como la prohibición.

En cuanto a la regulación, usaremos de ejemplo a Uruguay, donde el cannabis que se vende no tiene marca y los paquetes se asemejan más a un remedio que a un atado de cigarrillos o un objeto de consumo recreativo. Para acceder a este producto la ley oriental, exige que las personas se registren, resguardando sus datos, obtener un carnet y poder comprar en una farmacia, paquetes de 5 gr por mes o si uno quiere cultivar puede tener como máximo hasta 6 plantas por domicilio y solo puede cosechar ½ kilo por año. Y solo aquel que cuente con la residencia uruguaya va a poder tener acceso a la droga, evitando así el turismo de drogas.

Paquete de Cannabis medicinal de Uruguay

Mas ejemplo de estos son los países como Holanda, fue el primer país en objetar la convención de la ONU en la década de los 70’, rechazando la “Teoría del Escalón”, para ellos la prohibición iba a generar más violencia y el consumo no iba a desaparecer de los cafés donde vendían los narcos, los famosos Coffeeshops, y la verdadera puerta hacia las drogas es el Narco o Dealer, ya que estos se encargar de vender distintas drogas. Que las personas puedan conseguir Marihuana sin que nadie les ofrezca otra Droga es una manera de segmentar el mercado. A partir de la política de tolerancia a las drogas, bajo el consumo de la Heroína (Principal objetivo del Gobierno) y el consumo en ese país es relativamente bajo en comparación a otros países europeos. el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), la máxima agencia en la materia de la Unión Europea (UE), avala el balance realizado por las autoridades holandesas. De acuerdo con un informe del organismo, pese a que los holandeses despenalizaron su venta, consumen menos marihuana que los franceses y españoles. Además de eso, surgió un nuevo mercado, el Turismo de Drogas. Hay que tener en cuenta que este es un país que se distingue por su carácter liberal, que tiene en muy alta valoración la libertad individual de las personas. (Fuente)

Coffe-Shop en Amsterdam, Holanda 

Si bien Holanda y Uruguay son grandes ejemplo, son países relativamente con baja población en comparación a la de Argentina, pero existen países como E.E.U.U con 327 millones de Habitantes y Canadá con 37 millones de habitantes, donde el consumo es legal. Por ejemplo, en el Estado de Colorado (E.E.U.U) el consumo de cannabis está regulado de igual manera que el consumo de Alcohol y a su vez, se cobran impuestos a este mercado.

Los Avances sociales, se logran de a poco, en México hay una iniciativa muy fuerte para ir por el camino de Uruguay, con el apoyo de su presidente, López Obrador, Este país cotidianamente sufre desapariciones, asesinatos y secuestros a consecuencia de la famosa “Guerra contra las Drogas”.

Los Estados deben de encontrar un equilibrio para que la gente no siga muriendo y que cada uno sea libre de elegir como vivir. La Prohibición, claramente no es el camino, como ocurrió con la Ley Seca, La Despenalización no alcanza, la Legalización sin límites, como la del Tabaco, puede ocasionar muchísimos problemas, en cambio la Regulación, como ocurre en países ya antes mencionados nos puede acercar a un escenario donde prime la Salud Publica y los Derechos Individuales.

No hay que ignorar que el debate de la marihuana medicinal podría disminuir la percepción de riesgo de la población adolescente, por lo que se requiere delimitar de manera clara las condiciones del uso de la marihuana para fines terapéuticos (recetas, requisitos, entre otros), de manera que no se estimule el consumo de la sustancia fuera del ámbito terapéutico. Igualmente se requieren campañas que prevengan el aumento del consumo y la falsa percepción de que legalizar la marihuana medicinal equivale a aceptar que esta sustancia no tiene efectos colaterales, o que su uso cotidiano e intenso puede tener consecuencias perjudiciales.

Regular la marihuana medicinal no aumentará el crimen asociado al consumo de esta droga, debido a que no hay evidencia que asocie el consumo de marihuana con comportamientos violentos por parte de sus usuarios. Los estudios sobre la conexión entre violencia y el consumo de marihuana y de alcohol indican que la marihuana parece disminuir la agresividad.

Existe evidencia de la tendencia al comportamiento violento asociada al abuso de alcohol o de drogas duras como la cocaína y la heroína. El consumo de marihuana, en otras palabras, no parece conducir a más violencia.

Además, se deben tener en cuenta las mejoras en la seguridad social, ya que la legalización reduciría el narcotráfico porque le robaría mercado debido a que uno de los principales pilares del tráfico de drogas es la marihuana.

Las ventas ilegales de marihuana proporcionan miles de millones de dólares en ingresos anuales a las organizaciones de tráfico de drogas; la legalización de la marihuana les privará de estos ingresos. Así como la cancelación de la prohibición del alcohol en Estados Unidos, hace ochenta años, cambió el mercado de contrabandistas y mafiosos ilegales en corporaciones legales que pagan impuestos, por lo que la legalización de la marihuana se traducirá en empresas legales reguladas por el Estado desplazando a las organizaciones criminales.

Fuentes: Política de Drogas de Holanda,